LA "CARTA-FAN"
Querido Rubén,
Me llamo Claudia Folqués y soy una gran fan del arroz y de la Puerta del Sol, si existiesen grupis de tu restaurante yo sería una de ellas, aunque igual lo pongo de moda, quien sabe.
Bueno a lo que íbamos, hoy, 10 de junio he podido catar otra vez tu paella del señoret y un millón de tapas de las que no sabría cuál elegir, todo esto mientras respiraba a pleno pulmón la brisa del mar de Oropesa y me dejaba llevar por un insuperable vino blanco. Una estampa digna de postal. Pero lo que más me ha gustado del día, y esa es la razón de esta “carta-fan” es que he tenido el gran placer de poder conocerte como persona y empresario, todo a la vez, y Rubén, ha sido la bomba.
Me he dado cuenta de que te sales de lo socialmente conocido como, “convencional”, o como un sabio me dijo una vez, de lo aburrido. No hemos venido aquí para ser normales, eso ya no se lleva.
De la nada a tener grupis, ¿y todo eso sabes por qué? por tu carisma y esa pizca de locura. Pero no nos equivoquemos, una locura de las que molan, de las necesarias para cambiar las cosas.
Tu visión de la hostelería, de la vida y de romper con las normas sociales establecidas nos dejan siempre con ganas de más.
Somos lo que somos y tú, Rubén, ERES. Eres de los que deja huella, y ya te digo yo que tú la vas a dejar donde te plantes como la tinta y la historia que corren por tus brazos.
Que esto no se salga de contexto, tu templanza y seriedad se adueñan de ti en tu versión más empresaria, se mezclan con la alegría, las bromas y la pizca justa y necesaria de tu locura. Un cóctel molotov que explota en el momento justo y en el lugar perfecto, invadiendo a todo tu alrededor con tus ganas de correr, de saltar y de ganar todas las carreras que esta vida te propone.
A fuego se me ha quedado grabado tu consejo, no pierdas el tiempo, vidas solo hay una. Tú no lo has perdido, de eso no cabe duda y has conseguido quedarte con lo mejor de cada elemento, de Oropesa, de la comida y, sobre todo, de ti mismo.
Y es que son las personas que no andan, sino vuelan las que llegan lejos.
Y tú, Rubén, eres sin duda, de las que vuela.
Sin más dilación, ha sido un auténtico placer poder conocerte en todas tus facetas.
Atentamente, Claudia Folqués.
